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La tradicional alborada, adoptada por algunos ciudadanos para dar inicio a la temporada navideña, ya deja un saldo preocupante en el Valle del Cauca: seis adultos lesionados por el uso de pólvora en los municipios de Jamundí, Tuluá, Buga y Buenaventura.
Esto ocurre a pesar de la vigencia del decreto expedido por la Gobernación del Valle, que recomienda a los alcaldes de los 40 municipios y dos distritos especiales adoptar medidas estrictas para prohibir la producción, comercialización, almacenamiento y manipulación de pólvora y elementos pirotécnicos elaborados con fósforo blanco u otras sustancias explosivas.
María Cristina Lesmes, secretaria de Salud del Valle, hizo un llamado a la conciencia ciudadana:
“La pólvora distrae a unos y afecta a otros. Este año los invitamos a pensar antes de usarla, cinco veces. Cinco veces que están representadas en la mano, porque es la mano el órgano que más lesiones recibe en la temporada de pólvora por quemaduras”.
La funcionaria agregó que el trabajo de sensibilización continuará en toda la región:
“Seguiremos trabajando con la comunidad sobre el uso responsable de la pólvora: no en manos de niños, no en manos de personas alicoradas; siempre en manos de expertos, lejos de la posibilidad de quemar a nuestros menores, cuidando nuestras mascotas y con una mirada de solidaridad hacia las personas en condición de discapacidad”, indicó.
Con este inicio de diciembre, las autoridades reiteran el llamado a celebrar con responsabilidad y evitar que la pólvora siga dejando víctimas en el departamento.
