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La ciudad de Cali y el Valle del Cauca amanecieron con una noticia dolorosa: la muerte de Mery Salazar de Sierra, gestora cultural y defensora incansable del arte colombiano. Su fallecimiento, ocurrido el domingo 16 de noviembre de 2025, ha generado profunda consternación en su familia, en los sectores artísticos y en la sociedad regional y nacional.
El 24 de enero de 1990 creó la Fundación Gerardo Arrellano, que posteriormente adoptó el nombre de Fundación del Artista Colombiano. Desde allí impulsó la dignificación del oficio de músicos, cantantes y artistas nacionales, recibiendo múltiples reconocimientos de instituciones públicas y privadas.
Miembro del Consejo Municipal de Cultura como representante del área musical (2001–2003). Integrante del Consejo Territorial de Planeación Departamental en el área cultural (1995–2001).
Mery Salazar de Sierra, directora de la Fundación del Artista Colombiano, en uno de los actos culturales que lideró con pasión y entrega.
Con perseverancia y amor por la música, especialmente la colombiana, Mery se convirtió en una madrina de artistas. Su gestión permitió que intérpretes locales y nacionales tuvieran espacios de visibilidad y apoyo, incluso extendiendo su influencia a artistas de países vecinos.
La Alcaldía de Cali y entidades culturales lamentaron su partida, destacando su invaluable aporte al quehacer cultural. Su sonrisa permanente y su compromiso con la cultura la convirtieron en un referente de la gestión cultural en el Pacífico colombiano.
Mery Salazar de Sierra, incansable defensora del arte y la cultura, cuyo legado permanece vivo en la Fundación del Artista Colombiano.
La muerte de Mery Salazar de Sierra no solo enluta a su familia, sino que deja un vacío difícil de llenar en la vida cultural de Cali y del Valle. Su legado, sin embargo, permanece vivo en cada músico, bailarín y creador que encontró en ella una protectora y amiga. La Fundación del Artista Colombiano seguirá siendo testimonio de su entrega y amor por el arte.
