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La Clínica de Occidente, uno de los centros médicos más reconocidos de Cali, informó mediante un boletín oficial la suspensión temporal de la atención a los afiliados de la Nueva EPS.
La decisión, confirmada el 15 de noviembre de 2025, obedece a la acumulación de obligaciones económicas no resueltas por parte de la entidad promotora de salud, lo que ha afectado de manera crítica el funcionamiento de la institución.
El comunicado oficial:
“A la opinión pública, medios de comunicación y partes interesadas: tras muchos años de mantener la atención sin restricciones a los usuarios afiliados a la Nueva EPS, hemos llegado a un momento determinado en el que la acumulación de obligaciones no resueltas afecta de manera importante nuestras labores. Por ello, nos vemos obligados a suspender temporalmente la prestación de servicios a dichos usuarios, mientras se encuentra una solución definitiva”.
La clínica venía atendiendo a los usuarios de la Nueva EPS pese a no recibir los pagos correspondientes por los servicios prestados. La medida refleja la difícil situación financiera que atraviesan varias instituciones de salud en Cali, como la Clínica Versalles y Angiografía de Occidente, que también han suspendido servicios recientemente.
Miles de pacientes quedaron sin acceso a consultas y procedimientos, generando alarma entre la comunidad y llamados urgentes de las autoridades locales para que el Gobierno Nacional y la Superintendencia de Salud intervengan y garanticen la continuidad del servicio.
La suspensión en la Clínica de Occidente es un nuevo síntoma del colapso del sistema de salud colombiano. Mientras se buscan soluciones, los usuarios de la Nueva EPS deberán ser redirigidos a otros centros asistenciales, en medio de la incertidumbre por la atención de sus necesidades médicas.
